En el mismo corazón de la Habana Vieja existe una casa
que mezcla el hospedaje del visitante con una exposición de curiosidades y
objetos nostálgicos.
En un ambiente colonial de intimidad familiar, nuestro
huésped se embriaga en un universo de imaginación y fantasía del pasado.
Originalidad y confort se concentran en “La casa de Carlos y Graciela”.